Yo creo que no hay pecado dentro mío ni en cualquier manzana que haya mordido alguna mujer en ningún lugar.
Creo en mi corazón cuando desborda de emoción y no por ello vale
menos lo que digo.
Creo en mi cuerpo
que es tan fuerte como para llevar vida dentro mío y por eso no me siento débil
como tanto han sugerido.
Tengo una
inteligencia bastante bien concreta
capaz de valorar lo que realmente nos debe importar.
capaz de valorar lo que realmente nos debe importar.
Creo en mi luz y no
en el dogma.
En mis manos que
sanan heridas.
Y también creo en
mis sombras
que ya no llevo escondidas porque así
me siento más viva.
que ya no llevo escondidas porque así
me siento más viva.
Creo en mi mirada
cuando no estoy asustada.
Creo en mi razón
sólo si acompaña al corazón.
Creo en mi cuando me
abro a lo desconocido
Sin necesidad de atarlo con palabras para que mis miedos se queden tranquilos.
Sin necesidad de atarlo con palabras para que mis miedos se queden tranquilos.
Creo en vos cuando
estás conmigo con los brazos abiertos sin intentar convencerme de ser lo que no
soy.
Alejandra Baldrich –
Mujer Àrbol
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