Un espacio destinado a fomentar la investigación, la valoración, el conocimiento y la difusión de la cultura e historia de la milenaria Nación Guaraní y de los Pueblos Originarios.

Nuestras culturas originarias guardan una gran sabiduría. Ellos saben del vivir en armonía con la naturaleza y han aprendido a conocer sus secretos y utilizarlos en beneficio de todos. Algunos los ven como si fueran pasado sin comprender que sin ellos es imposible el futuro.

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viernes, 1 de agosto de 2025

❝𝐐𝐮𝐞𝐭𝐳𝐚𝐥𝐜ó𝐚𝐭𝐥 𝐧𝐨 𝐛𝐚𝐣ó 𝐝𝐞𝐥 𝐜𝐢𝐞𝐥𝐨 𝐩𝐚𝐫𝐚 𝐫𝐞𝐢𝐧𝐚𝐫… 𝐛𝐚𝐣ó 𝐩𝐚𝐫𝐚 𝐞𝐧𝐬𝐞ñ𝐚𝐫.❞


No venía con ejércitos.
Ni buscaba tronos ni sacrificios.
Su llegada no fue un acto de conquista…
sino un gesto de compasión.

Los antiguos mayas lo conocieron no como un dios que exigía adoración,
sino como un sabio que compartía conocimiento.
Les enseñó a cultivar el maíz,
a observar los cielos,
a escribir sus historias en piedra,
a entender que el poder verdadero no está en las armas…
sino en la mente y el corazón.

Fue guía, maestro, creador.
No impuso su voluntad,
despertó la del pueblo.

Y cuando su misión se cumplió…
no pidió templos, ni ofrendas.
Simplemente desapareció,
dejando tras de sí un legado que aún vive
en cada grano de maíz,
en cada códice,
en cada sabio que no impone…
sino que inspira.

Enseñanza maya:
El verdadero maestro no se proclama dios.
Se convierte en puente para que tú descubras el tuyo.

No sigas a quienes exigen obediencia.

Sigue a quienes despiertan tu conciencia.

#Quetzalcoatl #SabiduríaMaya #LegadoAncestral #CulturaMaya #MaízSagrado #ReflexiónDelDía #DespiertaTuConciencia #HistoriaConSabiduría
#VocesDelPasado #Virales

Fuente:
FB Pensamientos Escritos



lunes, 6 de septiembre de 2021

El mito de Quetzalcóatl: De serpiente emplumada a dios creador

Quetzalcóatl fue uno de los más importantes dioses del antiguo panteón mesoamericano. Su aspecto icónico se encuentra identificado en el propio nombre de este dios. Quetzalcóatl es una combinación de dos palabras del náhuatl (el idioma de los aztecas), quetzal, el ave de pluma color esmeralda, y cóatl, que significa serpiente. De este modo, Quetzalcóatl, es comúnmente también conocido como la Serpiente Emplumada

En busca del origen de Quetzalcóa

Pero esta deidad fue conocida también por otros nombres entre otras civilizaciones de Mesoamérica. El pueblo Maya, por ejemplo, se refería a Quetzalcóatl como Kukulkán, mientras que los Quiché de Guatemala conocían a este Dios como Gucumatz.



Las raíces de Quetzalcóatl, al menos bajo la forma de serpiente emplumada, pueden rastrearse hasta remontarnos a la civilización olmeca, que existió aproximadamente entre los siglos XIII a. C. y V a. C. Puede encontrarse una representación de la serpiente emplumada divina en una famosa piedra grabada olmeca conocida como Monumento 19 de La Venta, en el que aparece un hombre sentado ante esta criatura. El culto a Quetzalcóatl, sin embargo, sólo surgió varios siglos después, durante el Período Clásico Tardío.




Nuevos atributos de Quetzalcóatl

Una de las civilizaciones de este periodo en la que Quetzalcóatl era adorado fue la civilización de Teotihuacán, que existió entre los siglos III d. C. y VIII d. C. Parece que las gentes de esta civilización adoraban a Quetzalcóatl como dios de la vegetación, una deidad de la tierra y el agua que estaba estrechamente conectada a Tláloc, dios de la lluvia. Ciertos cambios sustanciales se produjeron en el culto a Quetzalcóatl cuando los toltecas llegaron al poder. Durante este período, Quetzalcóatl se transformó en dios de la estrella de la mañana y de la tarde – mientras que la guerra y los sacrificios humanos, rasgos esenciales de esta cultura, estaban relacionados con la adoración de los cuerpos celestes.



El papel de Quetzalcóatl como deidad solar se mantuvo durante el periodo azteca, aunque en esta época recibió además otras atribuciones diversas. Por ejemplo, Quetzalcóatl fue asociado al planeta Venus, se convirtió en el protector de los orfebres y otros artesanos, y era considerado además el dios del aprendizaje, la ciencia, las artes, los oficios y la agricultura. Quetzalcóatl también se dice que habría inventado el calendario y descubierto el maíz, dos elementos importantes de la civilización Azteca. Por otra parte, Quetzalcóatl se convirtió en un dios fuertemente vinculado a los vientos, específicamente a los que traían las nubes de lluvia, muy importantes para una sociedad cuya subsistencia dependía en gran medida de la agricultura.



Quetzalcóatl en los mitos de la creación

Lo más importante, sin embargo, es la elevación de Quetzalcóatl a la categoría de dios creador. Según los aztecas, Quetzalcóatl era uno de los cuatro hijos de Tonacatecuhtli y Tonacacíhuatl, pareja de dioses creadores originales. A Quetzalcóatl y a uno de sus hermanos, Tezcatlipoca, se les asignó la tarea de crear el mundo.

En una versión del mito, los dos hermanos luchan constantemente entre sí, lo que dio lugar a la creación y destrucción de varias edades sucesivas. Durante la Primera Edad, por ejemplo, Quetzalcóatl atacó a Tezcatlipoca con una maza de piedra, lo que provocó que su hermano enfurecido diera órdenes a sus jaguares para que devorasen a todos los seres humanos. Los aztecas creían que este ciclo de creación y destrucción se produjo en cuatro ocasiones, y que actualmente estamos viviendo en la Quinta Edad.



En una versión alternativa del mito, los dos hermanos son más cooperativos, consiguiendo crear la tierra y el cielo al transformarse en serpientes gigantes y partir por la mitad a un monstruoso reptil hembra conocido como Tlaltcuhtli (o Cipactli). Los dos dioses crearon entonces el sol y la luna, el primer hombre, la primera mujer y otros dioses.

El fin de Quetzalcóatl

Hay un mito tolteca que describe cómo Quetzalcóatl llegó a su fin. En este mito, el dios era un rey sacerdote de Tula, y nunca ofrecía sacrificios humanos, solo de plantas o pequeños animales. Según una versión alternativa de este mito, el dios solamente aceptaba tales sacrificios, pero no la sangre humana. En cualquier caso, Tezcatlipoca estaba descontento con Quetzalcóatl y quería deshacerse de él. Tezcatlipoca logró entonces emborrachar a Quetzalcóatl, lo que llevó al dios a cometer incesto con su propia hermana, Quetzalpétatl. Al despertar, Quetzalcóatl estaba tan avergonzado de sí mismo que caminó sin rumbo hasta alcanzar la costa atlántica. En una versión del mito, el dios construye una pira y se inmola en ella. En otra, zarpa hacia el este en una balsa hecha de serpientes.

Fuente: Ancient-origins

lunes, 16 de diciembre de 2019

Así habla Quetzalcóaltl

Por Mario Valmore Castillo (2015)



Limpia tu mente y todo se limpiará.

Le decían:

¿Como sabremos que nos enseña el atardecer y como nos enseña la mañana y como nos trae conocimientos cualquier circunstancia?
Y el así contestaba:

Cada cosa fuera de ti es un espejo donde te miras. Si la nube de la angustia llena el horizonte de tu corazón, veras una nube de angustia en cada corazón. Si la calma viene a sentarse en medio de tu pecho, veras que cada uno también lleva sentada la calma en su pecho. Si tu cabeza es la gua-rida donde se esconden pensamientos de odio, de rencor o de envidia, cuando camines por las calles y las plazas de la vida solo veras pasar por ellas al odio, y sentado en las bancas al rencor, y en cada esquina a la envidia.

Y dirás:
¡Desearía volar mas allá de esta ciudad porque esta contaminada y quisiera salir de esta casa, para sentir el campo limpio y su pureza!

Y yo te digo:

Limpia tu mente y todo se limpiara. Limpia tu corazón y todo se limpiara.

Limpia tu cuerpo y todo estará limpio. Ignorante es aquel que, viendo lo de fuera sucio, no se da cuenta de su suciedad y dice:

Me adelantare en mi corazón para limpiar mi templo, porque su altar esta sucio y su luz atenuada. Ignorantes son aquellos que pretenden limpiar su templo en el templo de los demás, y todos los días y todas las noches de su existencia piensan que el mal esta fuera de ellos y no en su corazón.

Mira los centzontles y mira los jilgueros y mira el cocoztli, ¿quién podría decirles: tu canto no es armónico?

Mira los sauces, y los ocotes, y los ahuehuetes ¿ quien podría decirles: tu crecimiento no es armó-nico?

¿Cómo entonces, podría decirse esto del hombre?

¡Cuánto aprendería un espíritu critico si supiera que se esta criticando en voz alta a si mismo, cuando critica a alguien!

Cada cosa tiene su lugar, y cada uno tiene su camino.

Solo aquel que no lo conoce sigue los caminos de otros, hasta que al fin, encuentra el suyo.

¡Bendito el día en que lo encuentra, porque ese día ha nacido de nuevo!
Solo a partir de ese momento le dirán algo los atardeceres, le dirían algo las mañanas, y le habla-ran las flores.

Empezara a caminar con la naturaleza, y su lengua será como la de los pajarillos, sus manos serán como ríos, y sus ojos serán la vida que mira a la vida.

— Amenhotep Tutmosis

Compartido por Fernando Emilio Flores


jueves, 24 de marzo de 2016

Quetzalcóatl y los sabios consejos que nos dejó a los hombres


La grandeza de espíritu de los pueblos nativos se forjó sobre una muy completa raíz filosófica y de valores humanos que tenían como objetivo forjar en la humanidad “in ixtli in yolotl”, un rostro y un corazón. El rostro como símbolo del orgullo y el corazón, de la pasión. Así lo dejó dicho Quetzalcóatl, así lo enseñó a nuestros ancestros para que fuéramos merecedores de su gracia.

Los consejos que Quetzalcoatl nos dejó, llamados también “huehuetlatolli” (palabra antigua).

1.
“Se moderado y austero. Verifica que los demás coman primero; entonces toma agua y lava sus manos y sus bocas. Que, no por ser noble, perderás tu nobleza ni caerán los jades, las turquesas de tus manos llenas”.
2.
“Amaos los unos a los otros, ayudaos entre ustedes en la necesidad con la manta, la joya, el salario y el alimento. Pues no es verdad y no es cierto si desprecias a quienes te rodean”.
3.
“Da limosna al hambriento, aunque tengas que quitarte tu comida. Viste al que va en harapos, aunque tú mismo te quedes desnudo. Socorre al que te necesita, aún a costa de tu vida. Mira que es una es vuestra carne y una vuestra necesidad”.
4.
“Bueno es que te mantengas por ti mismo. Crea, trabaja, recoge leña, labra la tierra, siembra nopales. Con eso beberás y te vestirás. Pues honra y enaltece el trabajo duro.”
5.
“Si se dice que hay heredero al trono, he aquí cómo mostrará su condición: Si baja su cabeza con humildad y si mira al pobre con especial consideración, se le infunden respeto su mísero ceñidor, su manto raído. Si encontrando en el camino a una anciana, un anciano, le dice “Padre mío, mi abuela: que la paz te encamine, que no tropiece tu pie”.


6.
“Acércate al que es modelo y ejemplo, pauta y señal, libro y pintura; a la persona honorable y de buena fama, a la condición social, la luz, la antorcha, el espejo”.
7.
“Acércate a quienes por todas partes van haciendo lo excelente, dando brillo, dejando lo bueno, imponiendo orden con prudencia, alegría y serenidad. A quienes son cofre y caja, sombra y abrigo, gruesa ceiba, sabino generoso que da brotes y se yergue poderoso, firme”.
8.
“En cambio, huye de estos sitios: El festín, el río y el camino. No te detengas ahí, porque ahí está y ahí habita el gran devorador: la mujer ajena, el esposo ajeno, la falda, la camisa ajena”.
9.
“El tolteca es sabio, es una lumbre, una antorcha, una gruesa antorcha que no ahúma. Hace sabios los rostros ajenos, les hace tomar corazón. No pasa por encima de las cosas: se detiene, reflexiona, observa”.
10.
“Escucha: La cortesía, la modestia, la humildad, el llanto y el esfuerzo te harán noble, amado, enaltecido. Escucha: Ningún soberbio, jactancioso o desvergonzado llegó jamás al reino”.

Fuente: Libro IV Códice Florentino; Huehuetlahtohllii, testimonios de la antigua palabra de Miguel León Portilla.