Un espacio destinado a fomentar la investigación, la valoración, el conocimiento y la difusión de la cultura e historia de la milenaria Nación Guaraní y de los Pueblos Originarios.

Nuestras culturas originarias guardan una gran sabiduría. Ellos saben del vivir en armonía con la naturaleza y han aprendido a conocer sus secretos y utilizarlos en beneficio de todos. Algunos los ven como si fueran pasado sin comprender que sin ellos es imposible el futuro.

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viernes, 13 de octubre de 2023

12 de Octubre - 1er. día de la Resistencia




¿Cristóbal Colón descubrió América en 1492? ¿O antes que él la descubrieron los vikingos? Los que allí vivían, ¿no existían?
Cuenta la historia oficial que Vasco Núñez de Balboa fue el primer hombre que vio, desde una cumbre de Panamá, los dos océanos. Los que allí vivían, ¿eran ciegos?
¿Quiénes pusieron sus primeros nombres al maíz y a la papa y al tomate y al chocolate y a las montañas y a los ríos de América? ¿Hernán Cortés, Francisco Pizarro? Los que allí vivían, ¿eran mudos?
Nos han dicho, y nos siguen diciendo, que los peregrinos del Mayflower fueron a poblar América. ¿América estaba vacía?
Como Colón no entendía lo que decían, creyó que no sabían hablar.
Como andaban desnudos, eran mansos y daban todo a cambio de nada, creyó que no eran gentes de razón.
Hasta no hace mucho, el 12 de octubre era el Día de la Raza.
Pero, ¿acaso existe semejante cosa? ¿Qué es la raza, además de una mentira útil para exprimir y exterminar al prójimo?
Después, el Día de la Raza pasó a ser el Día del Encuentro.
¿Son encuentros las invasiones coloniales? ¿Las de ayer, y las de hoy, encuentros? ¿No habría que llamarlas, más bien, violaciones?
Yo no celebro Genocidios!

Eduardo Galeano

sábado, 16 de octubre de 2021

CONTRAFESTEJO tras 529 años de Colonialismo
























Tras cumplirse 529 años de resistencia indígena, Pueblos Originarios marcharon ayer de congreso a plaza de mayo en el marco del 12 de octubre, día del inicio del genocidio más grande de la historia.

Cada año, un trayecto de calles de CABA vibra con los colores de la whipala. Sikus, wankaras, vestimenta típica, se suma a este recorrido de contrafestejo de Congreso a Plaza de mayo. Pancartas que se despliegan a lo alto, la cultura viva y la resistencia que se puede sentir en el aire. Esta manifestación se realiza como cierre de una gran encuentro que empieza el fin de semana previo al 12 de octubre y se convierte en días de lucha y reinvindicación. El contrafestejo intenta visibilizar algunos reclamos como la ley 26.160 y la ley de propiedad comunitaria, entre otros reclamos.

Antes de iniciar la marcha, durante la tarde, la coordinadora por el 12 de octubre, entregó en el anexo de la cámara de diputados el petitorio para la prórroga de la Ley 26.160 y La Ley de propiedad comunitaria.

Fotos: Jaqueline Orion y Laki Quispe
TeleSISA
Comunicación con identidad
#12deoctubre#abyayala #pueblosoriginarios #comunidadesindigenas #resistenciaindigena #Movimeintodemuejresindigenas #plurinacional#indigenas #manifestación#marcha #convocatoria #territorio

sábado, 3 de octubre de 2020

Tras dos décadas de lucha, comunidades mbya de Misiones (Argentina) reconquistaron sus tierras



Los pueblos que habitan el valle del Cuñá Pirú recibieron una reparación histórica de sus derechos sobre territorios que desde el 2001 se disputaban con la Universidad Nacional de La Plata (UNLP).

“Los mayores retos que tenemos son la recuperación de territorios que fueron siempre indígenas y ahora han sido usurpados y ocupados por terratenientes”, había dicho el jesuita, antropólogo y lingüista Bartomeu Melià en una entrevista con el Diario de Mallorca hace ya casi diez años.

El pasado viernes 25 de septiembre se cerró una lucha que llevó 20 años y tuvo como protagonistas a las comunidades del valle del Cuñá Pirú: Yvy Pita, Ka’Aguy Poty y Kapi’I Poty, que llevaron adelante un proceso de recuperación de sus tierras ancestrales en litigio con la UNLP.

La disputa por el reconocimiento de dominio comenzó en 2001, cuando miembros de estas comunidades se acercaron al Equipo Misiones de Pastoral Aborigen (Emipa) y les solicitaron su acompañamiento para recuperar lo propio.

La superficie de 6.034 hectáreas en los departamentos misioneros de Libertador San Martín (municipio de Ruiz Montoya) y Cainguás (municipio de Aristóbulo del Valle) estaban jurídicamente en manos de la UNLP desde hace 25 años.

La reserva, en su mayoría de bosques cultivados y montes nativos, había sido donada por la empresa papelera Celulosa de Argentina en 1992, con las comunidades que allí habitaban desde hace más de 100 años. Sobre Aristóbulo del Valle está ubicada la mayor parte del predio, que está dividido por la ruta provincial 7 y el arroyo Cuñá Pirú. Es una zona donde la provincia de Misiones, por medio de la Ley de Áreas Naturales Protegidas, decidió establecer el corredor verde con restricciones al uso de la misma.

Cómo comenzó
No siempre fue una lucha. En un principio, las comunidades buscaron establecer instancias de diálogo, que esperaban fueran respondidas como tal, pero no fue así. La UNLP priorizó sus intereses económicos y empresariales y -según cuentan- buscó hacerles perder el tiempo, de algún modo cansarlos para que se dieran por vencidos. Pero la sangre corrió más fuerte por las venas de estos pueblos.

Tras muchos viajes y decenas de acuerdos frustrados, en 2007 iniciaron la demanda de la mano del abogado Julio García.

Eso fue lo que marcó un antes y un después: fue el inicio de un litigio a todo o nada.

El Territorio viajó ayer hasta el lugar para escuchar de primera mano la historia contada por sus protagonistas. Juan de Dios Castillo (47) es de la aldea Ka’Aguy Poty: “Cuando asumí como autoridad empecé a reunir a mi gente, les dije que teníamos que pedir audiencia a la UNLP a ver si no devolvían nuestras tierras, queríamos dialogar, pero tuvimos respuestas negativas”.

Juan deja un legado no sólo para sus doce hijos y 18 nietos, no sólo para las 90 familias que conviven en la aldea, sino para todos los pueblos originarios. Juan revaloriza más que nunca el significado de la palabra “resistencia”.

Y agregó: “Empezaron los viajes, éramos tres comunidades, dialogábamos entre nosotros y pensábamos a qué abogado podíamos dirigirnos, tenía que ser una persona de confianza, que realmente fuera a apoyar a la comunidad”.

Juan recuerda las idas a La Plata bajo dos conceptos: la incomodidad de los viajes y lo largo que era. Por otra parte, menciona la amabilidad con la que eran atendidos por las autoridades de la universidad.

“Fuimos unas siete veces, en una trafic que tardábamos todo un día. El rector de la universidad nos recibía con un abrazo, muy amable, pero sin ceder. Al menos nos hacía entrar en su despacho”, mencionó con una sonrisa tímida, como si no fuesen merecedores de aquel gesto.

“Le pedimos que nos devuelva nuestro título de propiedad. Él nos dijo que iba a hablar con la gente de la universidad, pero yo creo que eran falsas esperanzas para que nos vengamos contentos”, lamentó.

Sin embargo, cuando entendieron que podían perderlo todo, cambiaron el tono del reclamo. “Había una depresión, la universidad se opuso y todos nos decían que no lo íbamos a lograr, nos preguntaban para qué íbamos a juicio. Pero son nuestras tierras, teníamos que ganar. Hubo internas, sí. Algunos tenían intereses económicos, pero pasó y seguimos adelante. Dios nos colocó a todos en una misma lucha”, contó.

Los festejos
“En el medio de un evento tradicional, en el que brilló la alegría con música y danza guaraní, y con el acompañamiento de la fuerza espiritual mbya en la palabra de las ancianas y ancianos de las tres comunidades, recibimos al juez de Paz de Aristóbulo del Valle, Pablo Hulet, para firmar el Mandamiento de Posesión Definitiva y Escrituración de las 6034 hectáreas que desde el 2007 estuvieran en juicio con la Universidad Nacional de La Plata”, habían informado este día histórico desde Emipa.

Al ser consultado sobre cómo fue este momento, Juan expresó: “La celebración fue linda porque es nuestra cultura tradicional, con nuestras danzas y charlas, yo me emocioné mucho. Le dimos la palabra a los ancianos, ellos decían ‘ahora vamos a preservar nuestra naturaleza, nuestras frutas y medicinas tradicionales’, esos son los mayores valores culturales que tenemos. La pesca, la caza. Lo que todavía hay lo conservamos”.

Juan es consciente de que hoy terminó esta lucha en particular, pero al pueblo guaraní aún le quedan muchas deudas que deben ser saldadas por el Estado nacional y provincial.

“Agradezco al equipo de Emipa, que siempre estuvieron con nosotros desde el comienzo de la lucha, pusieron un granito de arena para los pasajes, la comida y hasta hoy continúan ayudando a las comunidades. Se abrió un camino para siempre”, cerró.

Asimismo, su par Roberto Benítez, cacique de la comunidad Yvy Pyta, coincidió: “Terminó el juicio que empezó hace años, estamos muy contentos. Culturalmente para nosotros esto es muy grande. Tenemos que mostrarles a los chicos cómo era antes y cómo es ahora, es importante el ejemplo”.

Acompañamiento de Emipa
Vasco Baigorri, miembro de Emipa, fue quien acompañó a El Territorio en todo su recorrido. Fue también una de las personas que hicieron posible este proceso de recuperación. “Cuando la lucha se concreta en forma organizada, se llega a resultados positivos. Lamentablemente, aquí hay gente que ya ha muerto antes de llegar a verlos”, reflexionó.

Baigorri recordó todos los vaivenes de esta historia que comenzó en 2001 y terminó hace tres días. “La consecuencia es que el viernes pasado, como colofón de todo esto, el juez de Paz de Aristóbulo del Valle entregó a las comunidades oficialmente la posesión del predio, donde queda determinado que es de ellos”. En este sentido, explicó que si bien la sentencia de homologación recayó sobre las tres comunidades que iniciaron el proceso, hoy son cinco las que viven allí y componen más de 200 familias.

“Ellos pelearon solos, sin acompañamiento de estamentos oficiales. Les decían que nunca iban a ganar, que la universidad tenía dinero, y mientras tanto se seguía intrusando y parcelando este sector. Ahora resta el desalojo de los intrusos y frenar el desmonte que ocasionan”, manifestó. Recordó además que en Misiones ya hay precedentes de este tipo, como el conflicto entre las comunidades aborígenes y la empresa El Moconá SA por la tenencia del lote 8 en la Reserva de Biósfera Yabotí, que finalmente logró resolverse.

“Ellos lograron mantener espacios de resistencia”A lo largo de todo el proceso de recuperación de su territorio ancestral, los guaraníes estuvieron acompañados -además del Emipa-, por abogados que fueron pioneros en asuntos indígenas y ayudaron a marcar precedentes históricos.

Uno de ellos es Julio García, con quien El Territorio dialogó para poder entender los marcos legales que se dieron lugar en todo este recorrido. “Yo cerré el acuerdo con la universidad, tuvo una homologación judicial y la consecuencia de eso es este mandamiento como la materialización de un derecho”, comenzó explicando.

El conflicto con la universidad, según el testimonio de Julio, fue inesperado en términos judiciales. Tanto él como las comunidades, habían apostado a una instancia de diálogo empático, aunque sólo se mantuvieron ciertas formalidades que poco tenían que ver con la empatía. “Fue muy frustrante porque no veíamos a la universidad como una empresa, creíamos que la negociación era viable, pero nos encontramos con una férrea defensa de los intereses”, rememoró.

Las comunidades comenzaron a transitar el camino de la mano del abogado Ricardo Altabe, quien ya falleció, pero lo recuerdan con mucho cariño. Desde 2003, García comenzó a sistematizar la estrategia, y tras cuatro años de negociación, llevó el proceso a juicio en 2007. “Esa primera etapa terminó con un clima de mucha tensión entre las comunidades, con alguna fragmentación, que es lo que provocan estos procesos largos, pero el juicio logró reacomodarlos y empezamos ahí otra etapa, que fue saludable, ya nos paramos en frente de la universidad. Más allá de lo legal dejamos de cuidar los modos. Siempre fueron muy amables, pero no estábamos de acuerdo”, afirmó.

García reconoció que ya en 2015 había una fuerte posibilidad de que el conflicto llegara a su fin. “La universidad hace varios años decidió reconocer el derecho de propiedad de las comunidades indígenas, el acuerdo podría haber sido cerrado entre el gobierno de Misiones, la UNLP, el Instituto Nacional de Asuntos Indígenas y las comunidades. Por cuestiones de cambio de gobierno y el ingreso de una nueva etapa este proceso no se pudo concluir en ese momento”, comentó.

La buena noticia fue que pese a las cuestiones políticas, la universidad mantuvo su decisión. Finalmente, el año pasado, el acuerdo fue homologado y ese fue el paso previo al Mandamiento de Posesión Definitiva celebrado el viernes.

Una visión cultural
Más allá de su labor legal, García desarrolló una visión integral y cultural de los guaraníes: “El criterio de fragmentarse en comunidades son términos de nuestra cultura, pero ellos son un pueblo que se maneja bajo sus propios criterios y está expandido por toda América Latina. Bajo nuestro concepto de la conformación de estados-nación es difícil de comprenderlos, pero en ellos es una dinámica distinta”.

En cuanto al trabajo realizado por Emipa, destacó que “no podría haber labor jurídica ni política exitosa sin este puente de decodificación cultural”. Por eso aseguró que la gestión comunitaria del conflicto fue exitosa en términos de efectividad, ya que lograron que las comunidades pudieran ser partícipes activos de todo el proceso.

Fuente: Diario El Territorio (Posadas) - 29 de Septiembre de 2020.
Escrito: Victoria Bergunker
Fotografía: Sixto Fariña

https://www.elterritorio.com.ar/tras-dos-decadas-de-lucha-comunidades-mbya-reconquistaron-sus-tierras-83875-et?fbclid=IwAR07YYu9NyaAvS_qh67Z1IiYpJCB28Gzd8wZjIFN-VxPYO9dFO7R_tJwd1I#.X3cJZWMJDyk.facebook

lunes, 2 de diciembre de 2019

La Resistencia de Punta Querandí (Tigre-Bs As) La protección de los humedales continentales: una victoria tras una década de lucha

Por Comunidad Indígena Punta Querandí - 
1° de Diciembre de 2.019


Este martes a la noche en la última sesión del Concejo Deliberante se aprobó la ordenanza que protege una parte importante de los últimos humedales continentales de Tigre, creando el “Distrito de Gestión Especial Planicie del Río Luján”. Un enorme logro colectivo y un cambio de paradigma.




La nueva normativa declara de preservación ambiental cientos de hectáreas alrededor de la Comunidad Indígena Punta Querandí: concretamente, hablamos de amplias zonas de Dique Luján, Villa La Ñata y un pequeño sector de Benavidez. Además contempla la participación de los Pueblos Originarios en los sitios arqueológicos, la creación de un Consejo Asesor Vecinal y promueve proyectos de hábitat que garanticen el comportamiento natural del territorio teniendo en cuenta la transparencia hídrica, su inundabilidad y su biodiversidad. En este sentido, incentiva la construcción en palafito (como en la Isla) y desalienta los barrios privados.
Los 14 cortes de ruta llevados adelante durante este 2019 por la Asamblea de Dique Luján y Villa La Ñata fueron el golpe final a un modelo de destrucción del patrimonio natural y cultural para beneficiar a los grandes negociados inmobiliarios que mucho daño le ha hecho a nuestro querido Tigre y a toda la Cuenca del Río Luján (Escobar, Pilar, Campana y otros Municipios).
Este modelo viene siendo cuestionado desde hace una década, con picos de movilizaciones en los últimos años, como las masivas protestas a fines de 2014 y 2015 junto a la Asamblea de Vecinos Inundados, la campaña “Más Humedales Menos Inundados” lanzada en la Estación de Tigre (2016) y tantas manifestaciones en Dique Luján y Villa La Ñata desde el 2012.
Los desafíos que siguen son muchos y los vamos a transitar con la guía de nuestros ancestros, la organización popular y la unidad, el único camino para seguir recuperando nuestros derechos.
Comunidad Indígena Punta Querandí (Dique Luján).

Comunidad Qom Cacique Ramón Chara (Benavidez).


DIVERSAS CONQUISTAS POPULARES  

En el Concejo Deliberante, confluyeron varias organizaciones territoriales y políticas que se llevaron importantes conquistas. Una de las más numerosas eran del Movimiento Evita y de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), desde donde reivindicaron muchas ordenanzas aprobadas, entre las cuales estaba la cesión de cuatro terrenos para producir alimentos con huertas agroecológicas. “Los movimientos populares dijimos presente para acompañar los proyectos que representan las políticas de Tierra, Techo y Trabajo”, dijeron desde el Movimiento Evita.
Otro numeroso grupo eran militantes de la Organización Peronismo 26 de Julio, de activa participación en la lucha de los humedales y cuyo referente, Javier Parbst, asumió hace un año su banca en el Concejo en reemplazo de Roxana López, quien asumió un cargo ejecutivo municipal.
Al respecto, Parbst declaró: “Gran sesión ordinaria donde gracias a la lucha colectiva, a la militancia coherente y combativa, se aprobaron proyectos que fueron sostenidos por el poder popular todo el año; logramos el Distrito de Gestión Especial Planicie del Río Lujan para salvar los humedales de Tigre, el reconocimiento a Isla Esperanza, cooperativa que se enfrenta a los poderosos desde el trabajo colectivo, la declaración de interés legislativo a las huertas comunitarias, la legislación del Consejo de Hábitat para seguir construyendo espacios horizontales en los que se piensen integralmente las políticas públicas”.
“Éstas y otras ordenanzas que celebramos durante el año fueron fruto del poder popular en el concejo, demostrando que con causas justas y nobles podemos convocar a las mayorías a construir el Tigre que soñamos”, concluyó el legislador.
El reconocimiento a las huertas comunitarias venía siendo impulsado por un Frente integrado por el Movimiento Evita, la 26 de Julio, la Comunidad Pacheco y la Comunidad Indígena Punta Querandí.
Desde la Comunidad Pacheco, espacio de capacitación en huertas con sede en Ricardo Rojas, señalaron: “Vecinos y organizaciones sociales del territorio presentes en el recinto para escuchar la aprobación de ordenanzas que llevamos adelante, debatimos y defendimos durante todo el año con palabras y con nuestra práctica diaria. ¡Pueblo organizado y poder popular!”.

“DECLÁRASE AL DISTRITO DE GESTIÓN ESPECIAL PLANICIE DEL RÍO LUJÁN COMO ÁREA DE PRESERVACIÓN AMBIENTAL”
Por Asamblea de Dique Luján y Villa La Ñata
El martes 26 de noviembre de 2019 festejamos en el Honorable Concejo Deliberante de Tigre la aprobación de la ordenanza municipal que dispone la creación del “Distrito de Gestión Especial de Planicie del Río Luján” en la última sesión legislativa del año.

Luego de meses de lucha en las calles para preservar nuestro territorio, logramos que se promulgue esta normativa que en el futuro regulará el relleno de los humedales en Dique Luján, Villa La Ñata y parte de Benavídez.
Confluimos cargados de esperanza al HCD de Tigre, allí sumados a una multitud que reclamaban derechos y mejor calidad de vida, fuimos protagonistas de una victoria que construimos en las calles con pasión, voluntad, convencimiento y necesidad.
Estos factores hicieron de la Asamblea de vecinos un instrumento para frenar la vorágine urbanizadora de los grandes grupos inmobiliarios y salvar los restos de ecosistemas para vivir en un entorno sostenible.
Desde el comienzo planteamos como eje central de nuestro reclamo el NO relleno de los humedales para cuidar de los beneficios ambientales que proveen; el cuidado de los pobladores preexistentes a los barrios privados y la preservación del legado arqueológico de nuestros antepasados indígenas.
Supimos de enojos y desaliento, pero nunca bajamos los brazos. En esta lucha que siempre fue pacífica, sugerente y esclarecedora. Articulamos lo social, ambiental y lo político porque en el camino entendimos que todo cambio se logra desde el pie, pero se define en la superestructura.
En debate aprendimos y nos transformamos en militantes por la vida. Hoy aún saboreando este triunfo, ya nos preparamos para lo que viene. Seremos custodios de la planicie, de su integridad como tejido social y de su naturaleza.
Como miembros del Consejo Asesor que se creará, actuaremos para que cada punto de la ordenanza se cumpla en su sentido más superador, porque los emprendimientos inmobiliarios para clases sociales privilegiadas ya han hecho mucho daño en nuestro distrito y es momento de empezar a remediarlo.
Hoy ganamos un trozo de poder popular y desde allí edificaremos una planicie inclusiva, sostenible y que aumente nuestra calidad de vida. Gracias a quienes desde distintos espacios nos apoyaron; gracias a cada vecino por salir un poco de su propia vida y ser parte de algo más grande. Hoy nos conocemos más, somos más fuertes, desde esas condiciones construiremos esperanza.
Fuente: https://puntaquerandi.com/2019/11/28/la-proteccion-de-los-humedales-continentales-una-victoria-tras-una-decada-de-lucha/

Casa de la Resistencia Guaraní es inaugurada en la Comunidad Mbya Guaraní Tupa Mbae

La comunidad mbya guaraní Tupã Mbae ubicada en las 600 hectáreas de Puerto Iguazú, inauguró el día 29 de Noviembre de 2019 el emprendimiento turístico denominado la Casa de la Resistencia Mbya Guaraní. Se enmarca en los lineamientos del turismo comunitario y si bien contó con la ayuda de colaboradores, es todo autogestionado. 

La presentación del proyecto, que se pone en marcha luego de mucho esfuerzo y trabajo, incluye una instancia de capacitación abierta al público que tiene un costo de 300 pesos en la que los participantes conocerán con más detalles la lucha del pueblo y su cultura.

La Casa de la Resistencia Mbya Guaraní busca reflejar la lucha constante del pueblo originario por defender su territorio ante el avance del hombre blanco. 

Morínigo: “Desde 1990 hasta ahora todo lo que nos pasó y aunque pase el tiempo seguimos de pie”

En la casa habrá exposición de fotos con textos explicativos y será guiada por los integrantes de la aldea, quienes contarán en primera persona como permanecieron en su territorio luego de la disposición provincial de ceder parte del terreno para la construcción de hoteles amigables con el medioambiente en la ahora denominada selva Yryapú.

Además, los turistas que opten por hacer el tour que propone la comunidad disfrutarán de una caminata en la selva donde se podrá contemplar un palo rosa de 500 años de edad y visita a un mirador. 


“Estamos muy felices ante la inauguración, es algo que como pueblo venimos trabajando desde hace rato, queremos que todos sepan quiénes somos, cómo vivimos, nuestra cultura y reflejar la lucha en defensa de nuestra tierra”, explicó Nélida Morínigo, quien se encarga de la prensa del emprendimiento.

Casa de la Resistencia Guaraní, inauguración
Los integrantes de la aldea se capacitaron en un curso de turismo comunitario dictado Claudio Salvador, miembro de Travolution, con el apoyo del Ministerio de Turismo de la Provincia. El emprendimiento fue presentado como trabajo final del curso y ahora se materializa, de la misma manera lo harán los demás proyectos. 

Fuente: Diario El Territorio (Posadas)-Noviembre de 2019
Fotografías: Diario El Territorio - Radio Cataratas - Facebook Casa de la Resitencia Guaraní - Radio Nacional Iguazú 

miércoles, 27 de noviembre de 2019

La importancia de la memoria histórica de los pueblos originarios


Escrito: Martín Delgado Cultelli 

América Latina es un continente construido por sucesivas olas colonialistas. Cada una parada sobre los hombros de las otras. Hemos sido condenados a ser proveedores de materias primas a los grandes centros económicos y políticos del mundo. Si bien el colonialismo tiene una faceta de dependencia económica tiene otra que es la subjetiva. Esta dependencia esta plasmada en la negación constante de nuestras raíces indígenas y la admiración casi ciega de toda la producción intelectual de Occidente. De ahí no solo la importancia de descolonizar las relaciones de producción sino descolonizar las mentes y sentires.

Uno de los pilares básicos del colonialismo que nos agobia es la denominada “Doctrina del Descubrimiento”. Dicha “doctrina” es el corpus de preceptos básicos que se mantienen prácticamente inmutables desde hace 500 años. Esta “doctrina” esta basada en los conceptos de terra nulis y de paganismo. El terra nulis sostiene que el territorio descubierto por los colonizadores al no ser explotado de una forma racional y capitalista, se lo considera tierra salvaje, tierra vacía de gente. No es casualidad que en el siglo XIX a los territorios controlados por indígenas y gauchos se les denominara “Desierto”. Hoy en día vemos esto cuando se refieren a la Amazonia como territorio deshabitado y en donde solo hay naturaleza salvaje, cuando en realidad allí viven miles de indígenas.

El precepto del paganismo estaba basado en que como las culturas indígenas tienen creencias y tradiciones distintas a las de Occidente, representado en la moral judeo-cristiana, entonces esta justificada su violentación o, en el mejor de los casos, tratar de que se asimilen a la civilización occidental. A principios del siglo XX, la totalidad de los países del continente tenía expresado tanto en sus constituciones como en otro tipo de legislaciones y políticas estatales, que los pueblos originarios debían asimilarse a la cultura de los Estados Nacionales, osea la civilización occidental. Incluso hoy en día las regiones donde habitamos preferentemente los pueblos originarios son las regiones que reciben más visitas de misioneros evangélicos. Además, en pleno siglo XXI, el reconocimiento de las autonomías territoriales y culturales sigue siendo un tema urticante para la mayoría de los países de la región.

Cabe destacar que los preceptos de la Doctrina del Descubrimiento fueron esgrimidos hace casi 500 años por Juan Gines de Sepulveda en su texto La Justa Guerra Contra los Indios. Recordemos que Sepulveda fue quien debatió con Fray Bartolome de las Casas en el famoso “Debate de Valladolid”. Famoso debate entre prestigiosos intelectuales para determinar si los indígenas eramos seres humanos o eramos animales y por lo tanto si se nos podía esclavizar y masacrar. Si bien se considera que el debate lo gano De las Casas y así surgió la primer legislación indígenista de la historia. En los hechos, el que triunfo, fue Sepulveda.

El triunfo de Sepulveda se debe a que seguimos con los pilares de terra nulis, de que antes de que llegaran los europeos no había nada en el continente. La historiografía de la mayoría de los países comienza con la llegada de Cristobal Colon al continente. Olvidando por completo que el continente tiene presencia humana de al menos 24.000 años. Cuando se quiere ir más atrás en la historia, siempre se va a Europa. ¿Pero acaso no hemos nacido en esta tierra? Tengamos o no raíces indígenas, es importante conocer la historia y la memoria del territorio donde vivimos y donde queremos realizarnos como seres humanos.

Hay una serie de estereotipos construidos por los colonizadores basados en la inferioridad de los pueblos originarios del continente frente a la civilización occidental. A las experiencias de Estados Indígenas Precolombinos como el Tawaintisuyu, el Estado Mexica (azteca) o los Señoríos mayas y muiscas siempre se les destaca la brutalidad, lo sanguinario y lo despótico de sus regímenes. Si bien eran sociedades estatales, osea había desigualdad social, estos estados no eran mono-culturales sino plurinacionales y garantizaban la comida a todos sus súbditos. Incluso hoy en día los Estados de matriz occidental les cuesta el reconocimiento de la pluralidad cultural al interior de sus territorios y no garantizan que todos los ciudadanos tengan alimento básico. Además esos Estados no eran más represores y sanguinarios de lo que eran la mayoría de los Estados en el Mundo de la época. Recordemos que en la época que florecía el Tawaintisuyu y los Mexica en Europa quemaban vivas a las mujeres acusándolas de Brujería.
Si bien los pueblos indígenas con experiencia estatal merecieron la atención de los estudiosos de Occidente, la realidad es que la mayoría de los pueblos del continente somos pueblos pre-estatales. Osea jamás conformamos Estados. Se podría decir que la organización social por excelencia en el continente son las aldeas agrícolas y las bandas de cazadores-recolectores. Osea que la horizontalidad y el igualitarismo esta en la base de las sociedades latinoamericanas. Base que continuamente se ha querido borrar.

Como nuestros pueblos no construían ciudades, se nos redujo a sujetos cuasi-animales, con casi nula atención por parte de los estudiosos. Pero que no construíamos ciudades no significa que no tengamos nuestras complejidades y nuestro valor. El desarrollo de los relatos míticos, la cosmogonía y el conocimiento sobre el ecosistema donde se vive son muy superiores en pueblos pre-estatales que en pueblos estatales. Incluso los saberes de nuestros pueblos sobre biodiversidad actualmente son más relevantes debido a la gran crisis medioambiental que atraviesa nuestro planeta.


La colonización de nuestro pensamiento es de tal magnitud, que cuando pensamos en el medioevo, pensamos en una época oscurantista. Una época en donde se limitaba el libre pensamiento, donde habían guerras constantes y donde la mayor parte de las personas pasaban hambre. Esa fue la experiencia Europea alrededor del año 1000 DC. Pero esa experiencia no representa para nada al resto del Mundo. En esa misma época es el florecimiento de la gran civilización islámica. Y en Abya Yala (América antes de la colonización) fue una de las épocas de florecimiento cultural más ricas de todas. En los primeros años del medioevo tenemos al Maya Clásico, tan esplendoroso como la Grecia Clásica o Egipto, tenemos a Teotihuacan, tenemos a los Moche y sus señoríos gobernados por mujeres y tenemos a Tiahuanaco.
En esa misma época en la región que actualmente conocemos como Entre Ríos, Uruguay y Río Grande do Sul también fue una época esplendorosa. El desarrollo de la cerámica llego a estilizaciones super complejas plasmadas en la tradición cultural Goya-Malabriego. En la Cuenca de la Laguna Merin floreció la denominada cultura de los “Cerritos de Indios”, con enterramientos mortuorios super elaborados y con las primeras expresiones de cultivos de maíz y zapallo en la región. Una cultura mucho más compleja de lo que se nos han querido presentar. En torno al año 1000 DC es que florece el arte rupestre en el Uruguay, plasmado principalmente en sitios como Chamangá, Modesto Polanco y Cerro Pan de Azúcar entre otros.
Como vemos el medioevo no fue para nada una época de oscurantismo en el Abya Yala. Nuestra memoria ha sido moldeada por lo que le paso a nada más una parte de la humanidad.
En estas épocas de destrucción ambiental, vorágine capitalista, expansionismo militar y oligopolios de la comunicación, es sumamente importante que sepamos quienes somos y hacía donde queremos ir. Nuevos colonialismos se avistan en el horizonte. Por eso para poderlos resistir, es muy importante rescatar la memoria ancestral de los pueblos que han resistido por más de 500 años. Conectarnos con el territorio y con su historia nos permitirá ser un árbol de raíces profundas, el cual no podrá ser volteado por las tempestades.
Fuente: La Tinta - 4 de Junio de 2018

domingo, 28 de abril de 2019

Waoranis ganan batalla legal contra explotación petrolífera en Ecuador





Un tribunal de Pastaza dictó este viernes una histórica sentencia a favor de la etnia indígena Waorani, que exigía detener la licitación de un campo de petróleo en su territorio porque no se ha realizado una consulta en toda regla, como exige la ley.

La etnia indígena había pedido a la corte una acción de protección frente a la explotación petrolera en el llamado bloque 22, en licitación por el Ministerio de Energía e Hidrocarburo.

«Este tribunal determina que existe la vulneración al derecho constitucional a la consulta previa, libre e informada por lo que acepta la acción de protección para las comunidades pertenecientes a la nacionalidad Waorani de Pastaza», fue la sentencia de la jueza Pilar Araujo, según un comunicado del grupo de acción waorani.

La etnia alegaba que una consulta realizada hace años en esa región estuvo «viciada», «mañosa», y que no garantizó el principio de información y libertad de la consulta porque fue un «engaño a comunidades para justificar la licitación petrolera en el territorio».

La jueza reconoció así la vulneración del derecho a una consulta previa y, en consecuencia, el Ministerio deberá realizar esa consulta antes de licitar el campo.

A la batalla legal de los waoranis se sumó el actor estadounidense Leonardo DiCaprio, quien hoy, en un mensaje por redes sociales, les felicitó por su victoria.

«El pueblo waorani ha ganado una victoria legal para proteger los bosques lluviosos de las perforaciones petrolíferas y han sentado un precedente histórico para los derechos indígenas», señaló el actor.

«Se trata de un triunfo para todos los pueblos indígenas del Ecuador y del mundo. Esta es una victoria para los Waorani, Shuar, Achuar, Kichwas, Shiwiar, Sapara, Andwa y todas las comunidades del centro sur amazónico en defensa de su territorio», coincide en señalar un comunicado del grupo de Resistencia Waorani.

El grupo, así como otros también indígenas que forman parte de la población de Ecuador, consideró que se trata de una resolución que representa una «victoria para la Amazonía» debido a que servirá para proteger unas 200.000 hectáreas de selva tropical de la extracción petrolera.

Según un documento de la Defensoría del Pueblo, que fue parte integral en la petición contra el Ministerio de Energía e Hidrocarburos, la consulta previa en el Ecuador tiene como base el artículo 6 del Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo.

Allí se establece que «los Gobiernos deberán consultar a los pueblos mediante los procedimientos apropiados frente a medidas legislativas y administrativas susceptibles de afectarles, así como de participar libremente con los medios adecuados y bajo el principio de buena fe».

Esta también contenida en la Constitución del país y sus diferentes leyes a través de normativas y regulaciones.

«A través del proceso de consulta previa se busca garantizar la protección de su integridad cultural, social y económica», destaca el documento de la Defensoría.

Los pueblos indígenas se oponen a la explotación petrolera y minera porque lo consideran una amenaza a su forma de vida, a sus tradiciones y la Tierra Madre.

Los principales campos petrolíferos ecuatorianos se encuentran en la Amazonía, precisamente donde se concentran una gran numero de tribus indígenas.

Según un mensaje de Twitter de Resistencia Waorani, en 2011 los bloques petroleros en la Amazonía ecuatoriana cubrían el 76 por ciento de la superficie total de territorios de siete nacionalidades indígenas y afectaban a la movilidad de colectivos aislados como Tagaeri y Taromenane. 
Fuente: EFE - 26 de Abril de 2019

viernes, 22 de febrero de 2019

Indìgenas brasileños luchan por sus tierras al ritmo del rap guaranì


"Los niños quieren crecer, los jóvenes quieren vivir y nuestra naturaleza está muriendo, ¿por qué?". Con rimas en guaraní y portugués, tres jóvenes raperos denuncian los problemas de los pueblos indígenas en Brasil.

El rap es un grito de guerra para reivindicar su lengua y su cultura. Son Oz Guarani, un grupo indígena de la aldea de Tekoá Pyau, dentro de la reserva del Jaraguá, situada a 20 kilómetros de la ciudad brasileña de Sao Paulo. 

Jefersom, de 19 años, conocido como 'Xondaro' (guerrero), Gizeli Para, de 18, y Mano Glowers, de 22, son los integrantes de esta banda con la que los niños de su aldea ya se identifican.

"En la ciudad corre la sangre de nuestro pueblo asesinado/ Europa se enriqueció de ese oro saqueado", denuncian en su tema 'Contra Pec215'. La canción hace referencia a una polémica Propuesta de Enmienda Constitucional (PEC) con la que se pretende transferir del Ejecutivo al Congreso Nacional las competencias exclusivas sobre la demarcación de tierras.

"Al principio sufrimos por los prejuicios. Nuestros parientes tenían miedo de que olvidásemos nuestra lengua y cultura, pero con el tiempo demostramos que el rap es una forma de fortalecerlas", recuerda Jefersom sobre los primeros comienzos del grupo en 2014, durante un conflicto por la demarcación de tierras. 

En 2015, la reserva de Jaraguá fue delimitada en 532 hectáreas, pero después, en 2017, el entonces presidente Michel Temer anuló el decreto porque consideró "un error administrativo en el procedimiento" la decisión anterior.

Hoy viven unas 1.000 personas –130 familias y 400 niños– limitadas en 1,3 hectáreas sobre las 532 no demarcadas. "Somos una población muy grande viviendo en un área muy pequeña del tamaño de tres campos de fútbol", subraya el rapero. 

"La tierra para sobrevivir"

"Sin guerra y sin lucha queremos vivir/ Es tan difícil comenzar a entender/ Queremos la tierra para sobrevivir/ La cultura y las costumbres queremos mantener", cantan en 'Conflictos del pasado', el tema con el que comenzaron su carrera musical. 

Poco a poco, el grupo –siempre en contacto con otros raperos indígenas del país como Bro Mc's, situados en la región de Mato Grosso do Sul– ha conseguido hacerse un hueco fuera y dentro de su aldea. Ofrecen conciertos por todo el país y la prensa se ha hecho eco de ellos en varias ocasiones. "El rap da visibilidad a nuestra lucha, a nuestra resistencia y ha abierto las puertas a las generaciones que vienen por detrás", explica el joven, a quien le gusta disfrutar de su tiempo libre en compañía de Talya, su hija de dos años. 

El rap es su principal motor de protesta, pero en la aldea también acostumbran a organizar debates y actividades con el resto de jóvenes. "La lucha es muy constante", comenta Jefersom, que ha trabajado como agente cultural y ahora hace un curso de medicina indígena. 

Problemas en la aldea

Uno de los problemas que más incomodan a los habitantes de Tekoá Pyau es el de los animales abandonados. Cerca de esta comunidad se encuentra una carretera nacional. Muchos perros y gatos son abandonados allí y terminan por entrar en la comunidad en busca de abrigo. Otra cuestión es el saneamiento básico. "Muchas veces un padre o una madre quiere hacer, por ejemplo, comida para sus hijos y no tiene agua", lamenta. 

Pero el asunto prioritario para ellos, y para el resto de pueblos indígenas [en Brasil existen alrededor de 305 tribus con un total de 900.000 personas, lo que equivale al 0,4 % de la población brasileña, según la ONG Survival], es la demarcación de tierras.

El rapero cuenta que los indígenas tienen mucha fe en todo. "Agradecemos despertarnos por la mañana, dormir por la noche y los alimentos que comemos. Cuando salimos de la aldea queremos mostrar nuestra cara, nuestra lucha, nuestra resistencia", sentencia.

Nuevo Gobierno

El nuevo presidente del Brasil, Jair Bolsonaro, estrenó su mandato con un fuerte golpe a los pueblos indígenas y con unas políticas contrarias a la demarcación de tierras. Una de las primeras medidas que tomó tras asumir el cargo fue traspasar al Ministerio de Agricultura la Fundación Nacional del Indio (Funai), encargada hasta entonces de la demarcación de tierras indígenas y políticas dirigidas a esos pueblos. 

"Sabemos que el presidente no está a favor de los pueblos originarios, pero nuestra conciencia está tranquila. No es el primero contra nosotros. Ya nos hemos enfrentado a otros presidentes con pensamientos negativos hacia nuestra causa", comenta.

Jefersom tiene la ideas claras. "Vemos nuestros bosques deforestados, nuestros ríos contaminados, pero pase el tiempo que pase, los indígenas lucharán por la demarcación de tierras. Puedo vivir en la ciudad, pero nunca dejaré de ser indígena".

Fuente: RT - 21 de Febrero de 2019

 
Fotografia: Thiago Carvalho - Cortesía Oz Guarani