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Nuestras culturas originarias guardan una gran sabiduría. Ellos saben del vivir en armonía con la naturaleza y han aprendido a conocer sus secretos y utilizarlos en beneficio de todos. Algunos los ven como si fueran pasado sin comprender que sin ellos es imposible el futuro.

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martes, 8 de abril de 2025

8 de Abril Día Nacional de la Empanada en Argentina


Día de la Empanada: por qué se celebra hoy y la historia de esta comida en la Argentina

Todos los 8 de abril es la efeméride que celebra esta preparación típica del país, cuyo camino empezó hace siglos en Medio Oriente

Todos los 8 de abril se celebra el Día de la Empanada, un festejo que exalta las cualidades de esta comida típica de la Argentina.

Aunque el origen de la efeméride está fijado en el extranjero, lo que a su vez le da su carácter de Día Mundial, el epicentro de la fiesta está en la Argentina. Esto se debe a que la geografía nacional ofrece distintas variedades de esta preparación básica, que surgió de la necesidad de contener viandas en panes para comerlas en el camino.

Así, no sorprende que un país tan vasto y mayormente llano como la Argentina, donde por siglos se impuso la parsimonia de los viajes en carreta, se favoreció el desarrollo de la empanada, primero por necesidad en la travesía y, más tarde, por puro gusto culinario.

Cuál es el origen de la empanada en la Argentina
Hay que destacar que el origen de la empanada es difuso, aunque su lugar de nacimiento suele referenciarse en la antigua Persia, actualmente Irán. Allí, al calor de los largos viajes por el desierto, surgieron algunas de las primeras variantes de este plato, que aún hoy pueden conseguirse: el Fatay, la Sfiha, las Samosas y los Piroshki.

La invasión mora de la Península Ibérica llevó estas preparaciones a la tierra disputada por siglos entre el Islam y el cristianismo. Cuando este último se impuso finalmente en 1492, las empanadas ya eran parte de la cultura española, y todavía tienen un lugar destacado en las recetas de Galicia o Asturias, por ejemplo.

La conquista de América tuvo como una de sus infinitas derivaciones la llegada de este tipo de preparaciones al continente, donde el paso del tiempo, la geografía y las costumbres de las distintas latitudes le dieron repulgues, formas de cocción y rellenos distintos.

Las variantes más famosas se estructuraron alrededor de la región andina, de donde surgieron como especialidades en Tucumán, Salta, Catamarca y Santiago del Estero, por nombrar solo algunos puntos cardinales de la empanada.

Las diferencias son pronunciadas y causa de debate eterno: las tucumanas no pueden prescindir del jugo, los catamarqueños le suman papa hervida y cortada en daditos, mientras que los salteños buscan destacar con la sazón de su relleno, entre otros matices provinciales que vistos desde lejos forman una identidad nacional.

Influenciada por su puerto y el contacto entre criollos, latinos y europeos, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires incorporó todas estas recetas y también creó su propia escuela de empanadas, cómo puede degustarse actualmente en la Avenida Corrientes o en otros lugares donde proliferan locales que sirven este tipo de comida.

La importancia de la empanada en la cocina nacional está incluso tipificada, desde que fueron declaradas Patrimonio Cultural Alimentario y Gastronómico Argentino por la Secretaría de Cultura de la Nación.

Fuente
Diario La Nación - Argentina
8 de Abril de 2025

domingo, 22 de noviembre de 2020

La empanada misionera (Argentina) con influencia Guaraní, mandioca, maíz y pescado refleja la cultura y la identidad gastronómica de la Tierra Colorada




Salteñas, litoraleñas, mendocinas, porteñas y patagónicas son las empanadas más conocidas comúnmente dentro de la gastronomía argentina. En búsqueda de la empanada misionera, la influencia Guaraní, la mandioca, el maíz y el pescado se hicieron presentes en una preparación que promete ser deliciosa. 

La gastronomía en general se nutre de los productos regionales de cada lugar del mundo. Por ejemplo en Argentina su influencia ganadera posicionó al asado como la comida más representativa. En Misiones sucede lo mismo, la riqueza de sus tierras que permiten producir y cosechar un sinfín de alimentos y la influencia del río Paraná y Uruguay que posicionó la pesca, le regala a la cocina misionera la posibilidad de hacer platos que reflejan su cultura y su identidad.

Uno de los programas del concurso Masterchef Celebrity dio el puntapié inicial para comenzar la búsqueda de la empanada misionera, con ingredientes que reflejan en cada bocado su cultura, sus tradiciones y su historia. 

“Las empanadas son un producto típico de todas partes del mundo y en diferentes culturas y a lo largo de la historia se hicieron con los materiales y materias primas disponibles en cada lugar, tanto para producir la masa como para el relleno”, explicó el chef Marcelo Durán a Misiones Online.

Misiones Online consigió la receta del cocinero Lisandro Martinez, que hace empanadas de masa de mandioca y maíz con relleno de boga. Junto a Albina Esteche de Puerto Esperanza y las posibilidades de la virtualidad que hoy se potenciaron por la pandemia de coronavirus, realizaron la empanada misionera. 

“Una de nuestras primeras empanadas tiene un origen muy Guaraní y como en la antigüedad el trigo no existía se hacía con los elementos que uno contaba. Entonces las empanadas se hacían con masa de mandioca y maíz”, relató Alvina Esteche. 

El proceso de elaboración comienza haciendo un puré de mandioca con una cocción media para que no esté muy pasada. “Lo convertimos en puré sin elementos grasos, solo le podemos agregar como cosa nuestra de hoy un poco de queso rallado. Para amasar y conseguir una masa más homogénea le agregamos harina de maíz y lo amasamos hasta que tengamos una homogeneidad para poder estirarla”, explicó.

Y así se hace una masa con productos regionales, salidos de las chacras y producidos por misioneros, como ser la mandioca y el maíz. “Es una masa que no es muy elástica porque no tiene gluten por eso tenemos que estirar con un amasado suave y tiene que tener cinco milímetros de espesor sino se quiebra y ajustar los bordes después de rellenarla con previsiones, no de repulgues sino presión para que los dos bordes se unan”, indicó Alvina. 

No solo la masa tiene que tener productos de la tierra colorada sino también su relleno, quizás la parte más sabrosa de esta receta. Y para el cocinero Lisandro Martinéz la mezcla ideal debe tener Boga, un relleno fresco y suave, que expresa la inmensidad de los río Paraná y Uruguay, que nutren la tierra misionera hace siglos.


“Los elementos son una masa hecha a base de puré de mandioca frío, con maíz y ya tenemos tapas típicamente misioneras. El relleno puede ser a base de carne de surubí, con cebolla, cebollita y cosas que encontramos en cualquier huerta misionera. Así producimos una empanada de base de mandioca con surubí frita que es motivo de orgullo de muchos lugares que cocinan y practican una gastronomía misionera”, coincidió Marcelo Durán.

“Hace falta que nosotros los misioneros la repitamos en el tiempo, se las enseñamos a nuestras hijos, la cocinemos en nuestros restaurantes, la hagamos en nuestras fiestas, para que esta empanada de origen misionero se convierta en un clásico y se gane su lugar entre las empanadas argentinas”, aseguró Marcelo Durán. 

“En un ratito vamos a comer empanada misionera”, le dijo Lisandro a su pequeña hija Antonia, que esperaba atónita probar esta preparación y refleja la dicho por Marcelo Durán. Enseñar a los pequeños misioneros y replicar esta preparación en toda las mesas de la provincia. 

Con esta receta queda demostrado que Misiones tiene su propia empanada, diferenciándose de las tan conocidas empanadas salteñas, litoraleñas, mendocinas, porteñas o patagónicas. Con productos originarios que reflejan la cultura de sus pueblos, de su gente y su identidad.

El sabor del pescado representa la influencia de los ríos Paraná y Uruguay, que abrazan a la provincia y a todo su ecosistema natural. La mandioca y el maíz reflejan la cultura productora, la vida de chacra y la riqueza que hay en la tierra para producir alimentos.

Fuente: Misiones On Line - 22 de Noviembre de 2020

viernes, 23 de octubre de 2020

El mapa definitivo de las empanadas argentinas con sus 14 versiones



"Especialidad que consiste en una masa de pan que admite toda clase de rellenos". 
Esta definición de empanada del Larousse Gastronomique (la biblia de los cocineros ) es tan amplia que no admite controversias acerca de la elaboración de masas, rellenos y métodos de cocción, los tres pasos sobre los que, en la Argentina, emergen acaloradas diferencias respecto de una provincia a la otra.

El padre de la empanada

Sin embargo, ya lo dijo Domingo Faustino Sarmiento en 1869 durante un almuerzo en Tucumán: "Amemos, señores, la empanada nacional, sin perjuicio de saborearlas todas.". Lo dijo pensando en la unidad política ya que, minutos antes, había sentenciado a viva voz que la empanada sanjuanina era la mejor de todas, tras lo cual recibió la réplica enardecida de los comensales, representantes de todas las provincias que habían asistido a la inauguración del ferrocarril.

Hábil para modificar su discurso sobre la marcha como cocinero que rectifica la sazón antes de emplatar, el prócer usó la metáfora de la empanada para definir los problemas de la Nación y dijo, de acuerdo con el relato de su nieto Augusto Berlín: "Señores, esta discusión es un trozo de historia argentina, pues mucha de la sangre que hemos derramado fue para defender cada uno su empanada".

La ruta de la empanada

La historiografía culinaria encuentra las primeras referencias de algo parecido a una empanada en Persia, hace más de dos mil años; se las cita en recetarios griegos donde frecuentemente estaban rellenas con carne de cordero.

Su finalidad era triple: conservar por algún tiempo la carne molida con distintas especias en un recipiente cerrado (la masa), resultar aptas para el transporte durante largas distancias y, sobre todo, ser fáciles de consumir en cualquier horario y lugar.

Se cree que fue el conquistador Ziyad al-Layti, más conocido como Tarik quien al mando de la invasión musulmana del siglo VIII llevó la fórmula de la empanada a la Península Ibérica y que con los años se hizo cada vez más conocida resultando incluso en versiones gigantes, como la empanada gallega.

Para la Edad Media ya era una preparación popular en toda España, hasta el punto que en el "Libro de guisados" de Ruperto Nola, impreso en Toledo en 1525, se publica su receta, de acuerdo con la recopilación de la doctora Susana Barberis.

La empanada llegó al continente americano con los conquistadores y se resignificó como todas las preparaciones que hacen pie en otras latitudes y se encuentran con el desafío de reproducirse con nuevos ingredientes y procedimientos.

Igual que los guisos españoles o las pizzas italianas, encontró en el país su mejor versión (en este punto no se admite controversia posible), y si bien cada provincia o región tiene su receta que promociona como la mejor, en algo hemos encontrado consenso. Amamos a la empanada argentina.

Empanada tucumana

El corte más común para el relleno es el matambre de vaca cortado a cuchillo, lleva cebolla y ajo rehogados, y comino, pimienta y pimentón para la sazón. No lleva papa ni aceitunas. Se cuecen en el horno de barro y los entendidos la comen agregándole chorritos de limón tras cada mordida.


Empanada salteña

La verdadera masa salteña es con harina de trigo, grasa y pimentón, de acuerdo con la investigación del cocinero Martín Caso. El relleno es un guiso de carne cortada a cuchillo picante y cocido en grasa de vaca con cebolla, verdeo, morrón, ají molido, huevo duro y papa hervida. Son muy jugosas y tan pequeñas que en dos bocados desaparecen. Cocidas al horno de barro.


Empanada riojana

Si no es jugosa no es una empanada riojana y si querés una clásica pedila "criolla" de lo contrario te podés encontrar con la mejor y más extraordinaria versión árabe estilo Fatay, que compite de igual a igual con la clásica. El relleno: carne de cuadril, cebolla y verdeo cocidos con grasa. No pueden faltar la aceituna, la papa, el ají morrón, el huevo duro y las pasas de uva.


Empanada sanjuanina

Las sanjuaninas llevan aceitunas y ajo y se distinguen por el agregado de tomate pelado en el relleno y vino blanco en algunos casos para la masa que es con harina de trigo y grasa. La carne es de lomo, carnaza de nalga o cuadril picado fino. Ají, pimentón dulce e incluso orégano para la sazón. Fritas o al horno.


Empanada jujeña

Su particularidad: el relleno lleva arvejas y lo llaman "recao"; al repulgue, "simbado", según la descripción de la doctora Barberis. Son similares en cuanto a la masa, el tamaño y la forma a las salteñas (y a su versión boliviana). Suele usarse también carne de charqui o de llama. Se acompañan con salsa picante.


Empanada santiagueña

Las receta de las empanadas santiagueñas la popularizó Doña Petrona de Gandulfo, llevan pimentón dulce, comino y orégano, y su carne, una vez cortada en tiritas, se precocina en agua hirviendo, antes de cocinarse en grasa, para hacerla todavía más blanda.


Empanada catamarqueña

Son similares a las santiagueñas pero hay controversia acerca del uso de pasas y aceitunas, que pueden o no emplearse. Sí existe acuerdo sobre una versión con carne de chivo. Llevan cebollas, verdeo, ají molido, pimentón, laurel, huevo duro y papa.


Empanada Litoraleña

Sin que se enojen los compatriotas de Corrientes, Entre Ríos y Santa Fe por no distinguir cada receta por separado, podrían agruparse versiones y decir que el relleno, que puede no ser el criollo típico, lleva pescados de río en lugar de carne de res, quesos, ciruelas y salsa blanca.


Empanada Chaqueña

Suele elaborarse la empanada criolla clásica con carne a cuchillo, cebollas, morrones, huevos duros y aceitunas, y también tiene una versión similar a la litoraleña con pescado de río como el dorado.


Empanada Bonaerense

Algo agrandadas, tienen ese espíritu de querer ser siempre un poco más que las otras. La receta es una amalgama todas las versiones. Por lo común, carne de res picada a máquina, no le falta la cebolla ni el verdeo, el laurel para saborizar el relleno, morrón picado, huevo duro y aceituna.


Empanada Sanluiseña

También conocidas como puntanas fuera de la provincia de San Luis, son más bien grandes, la masa tiene un sabor especial por incorporar grasa de chancho y el relleno de carne lleva poca cebolla y se sazona con orégano y ají putaparió.


Empanada Mendocina

Se cree que su tamaño es más bien grande por la influencia chilena. El relleno de carne cortada a cuchillo tiene ajo y comino y no pueden faltar las aceitunas. Se cocinan al horno y la masa se pinta previamente con huevo para que salga dorada y brillante.


Empanada cordobesa

Se espolvorean con azúcar y en algunas regiones como Traslasierra le agregan zanahorias al relleno. Como en San Juan, es opcional el uso de tomate pelado sin semillas. Hay una versión conocida como "pastel federal" donde al relleno clásico le agregan peras hervidas con vino tinto y clavo de olor.


Empanada patagónica

Además de la versión criolla, el relleno es más bien de cordero en lugar de res y, en el caso costero, con pescados o frutos de mar. En algún lugar de la costa rionegrina pueden probarse las de pulpito tehuelche y en Tierra del Fuego una versión con centolla.


Por Facundo Di Genova
Fuente: Diario La Nación - Buenos Aires - 9 de Julio de 2019