Ojos negros cual obsidiana, piedra preciosa que aun rota puede cortar.
Piel morena como el color de la tierra que me vió nacer, aquella que después de ser saqueada durante 500 años no pierde su riqueza y resplandecer.
Cabello negro y largo como la noche misma, cuando coyolchauki le acompaña en la soledad e ilumina en la obscuridad mi andar,
mi idioma, mi cultura, mis costumbres y mis creencias,
La sangre de mis abuelos corriendo por mis venas.
Su conocimiento, su sabiduría, su respeto y forma de ver la vida, eso soy, la suma de todos ellos, el legado mismo de sus vidas...
Texto EPALAPA / MEXICA
DIVERSIDAD CULTURAL ABYA YALA
Fotografía: Créditos al autor
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