El arroyo es mi
padre
Tiene alma
cristalina,
y la luna es mi madre
misteriosa y andina.
Yo tengo como hermanos
los fríos pajonales,
las flores de los campos,
las cumbres y los valles.
Las aves, los batracios
que cantan al silente,
astro que va despacio
camino al occidente.
Los riscos que repiten
ecos adoloridos,
y todo lo que viste
al universo andino.
Mi ponchito me abriga,
me protege del frío,
mis ojotas me guían,
conocen los caminos
Mi hermana es la bruma,
mi hermano es el labriego,
que arando con su yunta
va mascando recuerdos.
¡Que hermoso poema!
ResponderEliminarAtte.
Mar