lunes, 5 de agosto de 2024

Churros: la debilidad que no distingue estaciones


Con frío o con calor, nadie se resiste a la tentación de unos churros crocantes. Rellenos, bañados o simples: cada uno tiene su preferido.

Podría decirse que el churro es atemporal. Es un éxito en la playa, donde acompaña los mates de la tarde. También cuando el frío nos empuja puertas adentro y, si es con un chocolate caliente, mucho mejor. Los churros les ponen sabor a nuestras mañanas y a nuestras tardes. Los churros son una de las tradiciones más dulces y más ricas que tenemos.

Rellenos, o no. Bañados, o no. Las variantes son muchas, y la receta madre de todas ellas sorprende por lo simple. Harina y agua hervida con sal gruesa. Solo eso se necesita para crear esta delicia crocante que enloquece a todos. Luego, hace falta un poco de mano y algún que otro secreto.

En Argentina, sin embargo, hay uno que les gana a todos: el churro relleno con dulce de leche, como no podía ser de otra manera. Pocas cosas le compiten a la sensación tibia del dulce mezclado con lo crocante de la masa. Éxito rotundo en las mejores salas. Y todo el año de corrido.

Fecha de Publicación: 05/08/2024.
Fuente: Ser Argentino.
Escrito por Gabriela Saavedra.

No hay comentarios:

Publicar un comentario