miércoles, 29 de abril de 2020

Conviérte en un árbol



"Maestro, ¿cómo hago para resolver los problemas?"

"Conviértete en un árbol. Y déjate guiar por su sabiduría milenaria. Tienes que poner los pies y anclarte bien en el suelo. Como las raíces que se aferran con toda su fuerza a madre tierra. Es la única forma de dar a luz a los brotes. Normalmente solo pensamos en los frutos, pero las raíces tienen que cuidarse ".

"¿Las raíces? Maestro, pero las de un árbol están escondidas en la oscuridad. Y las mías también. ¿Cómo puedo cuidarlas?"
"Entra en esa oscuridad. El secreto de la floración yace allí. La luz sirve para hacer florecer una flor que ya ha conocido la oscuridad y ha logrado salir de ella. Y luego florece más fuerte. Más evolucionada. Más viva".

"¿Qué más puedo aprender de un árbol?"
"Te enseña a permanecer bien anclado a su centro. Incluso durante una tormenta. Este deja llevar sus hojas y ramas secas por el viento, su follaje se balancea y luego regresa a su lugar, más ligero, más exuberante, más limpio. 

Aprende a elevarte más y más hacia el cielo, gracias a las raíces que se vuelven más poderosas cada día y gracias a la poda necesaria que el tiempo y las tormentas producen. El árbol es el maestro del cambio: está en constante evolución y nunca contrasta con su devenir. Las lombrices de la tierra se escabullen entre sus raíces y los ruiseñores cantan en sus ramas: son capaces de encontrar sus opuestos, de modelarse sobre la base de la luz o la oscuridad, de acoger cada manifestación de vida ".

"Como maestro árbol. ¿Es esta una forma de enfrentar los problemas?"
"Es el único modo posible. Aprende del árbol que nunca cierra sus ramas, incluso durante una tormenta. No se defiende, no se opone, no se cierra. Se deja tocar por el viento, la lluvia, la nieve. Confía en cambiar a cada toque. Y es precisamente en este toque que se esconde el secreto de su fertilidad ".

De Elena Bernabé (autora)
Compartido y traducido por Takiruna.

Fernándo Emilio Flores

No hay comentarios:

Publicar un comentario